sábado

Ballet para Todos


Toc-Toc, y la puerta se abrió.

Parece ser que Susana Milano, actual directora de Cultura de Villa Gesell, se acercó a la casa de Eleonora y golpeó a su puerta. Salió a su encuentro su esposo y poco después tenían una reunión donde arreglaban presentar el espectáculo en Gesell. Si, así como se escucha, Eleonora Cassano que pasa tiempo de su veraneo en la Villa se entusiasmó con la idea de presentar ni más ni menos que Carmen en nuestra ciudad. Así, como quien dice ‘hablando la gente se entiende’ todos podrán disfrutar de un espectáculo de calidad.

¿Todos? Sí, todos porque será en el Autocine con entrada libre y gratuita. La fecha ya se fijó para el 16 de febrero a las 9.45 hs. El predio contará con sillas pero no alcanzarán por lo que se recomienda llevar su propia silla o reposera para disfrutar del espectáculo cómodamente. Para llegar al Autocine que se encuentra en la zona norte de nuestra ciudad hay que dirigirse a Av. Buenos Aires y Circunvalación, hacia la salida norte de Gesell.

Como figuras destacadas del Ballet Argentino están, la ya mencionada, Eleonora Cassano y Cecilia Figaredo. Y como artistas invitados está Hernán Piquin y la Antigua Jazz Band. La dirección del Ballet Argentino está dirigido por Julio Bocca y como directora residente, Sara Nieto.

Madrina

Como segundo gran acontecimiento está el de convertir esa noche a Eleonora Cassano en madrina de la Casa de la Cultura, lugar que físicamente ha dejado Tita Merello.

Asi que la noche del sábado va a ser sin dudas una gran noche, donde no se descuenta que haya alguna sorpresa más. ‘Ballet para todos’ así que disfrutémoslo, acerquémonos a algo que no está siempre al alcance de nuestra mano. Disfrutemos de la belleza pura que el hombre puede crear cuando utiliza su saber, su dedicación y voluntad para el bien.

PROGRAMA

CARMEN

Música: G. Bizet / R. Schedrin

Coreografía: Alberto Alonso

Diseño de Vestuario: Renata Schussheim

Diseño de Escenografía: Enrique Bordolini

Diseño de Iluminación: Miguel Cuartas

Carmen: Eleonora Cassano

Don José: Hernán Piquin

Torero: Jonatan Lujan

Corregidor: Lucas Oliva

Cigarrera: Cecilia Figaredo

El Destino: María Eva Prediger

Carmen, una sensual cigarrera, enamora primero al soldado Son José, a quien luego abandona por el torero Escarmillo. Don José, que sufre una pasión enfermiza por Carmen, no puede soportar la la situación y le exige que vuelva con él. Carmen que por sobre todas las cosas ama su libertad y no admite ser poseída por nadie, le niega esa posibilidad. La presencia de El Destino, un ambiguo personaje que toma la forma de un toro, va trazando con sus tintas, el trágico desenlace de esta apasionante historia de amor.

LA CALLE DEL RAGTIME

Coreografía: Margarita Fernández

Música: S. Joplin, D. Ellington, S. Smith, L. Carr, W. Handy, M. Hamlish, C. Mkhan

Vestuario: Francisco Ayala

Intérpretes: Antigua Jazz Band, dirigida por Pablo Scenna

Integrantes

Trompetas: Claudio Cageg, Rolando Vismarra y Mauro Montes de Oca – Trombón: Carlos Borgnia – Saxo alto y clarinete: Esteban Cabello – Saxo tenor: Orlando Merli – Saxo Barítono: Juan La Cruz – Saxo alto: Julio Jual – Piano: Luis Sirimarco – Blue blowing-vocal: Osvaldo Ricci – Contrabajo: Nicanor Suárez – Banjo y Guitarra: Pablo Scenna – Batería: Hernán Avella.

Nostalgia / Encuentro / Orquestal / Glamour / Mr. Bond y Mr. Tambo / El baile del Bougalusa / Pret Girl / Ragtime Dance / Orquestal Run Around

Nota: La compañía se reserva el derecho de alterar y/o modificar el programa y/o cambiar el elenco sin previo aviso.

Teatro de Trasnoche


Tres artistas geselinos en un show cómico musical para no perderse: Alt-Her-A-2

Hay mucho público en la sala, las luces de colores giran y ya la gente presiente la energía y agita las maracas que les dieron al entrar. Hay gritos de alegría, chiflidos, risas y aún nada comenzó. Entonces sí, salen a escena las tres monjas y un segundo después todo mutó, cambió. La gente festeja y nos sorprende que en ese dinamismo siga el espectáculo: todo el tiempo cambiará, tendrá su pequeña historia y a los diez minutos otra y otra y otra. Y todas tienen su humor y su energía propia, todas nos sorprenden, ninguna se parece a la anterior. Y es así que el show de Alt-Her-A-2 nos lleva de las narices y nos hace disfrutar...

Este es el gran espectáculo que realizan tres geselinos en escena, ellos son Pablo Alter, Betina Hernández y Verónica Arena. De allí, de la conjunción de sus apellidos, se forma el nombre del grupo.

Pero para empezar a indagar, tenemos que ver cómo les llega esta vocación a cada uno de ellos, como llega el teatro a sus vidas.

Verónica Arena hace teatro desde que tiene 16 años, “hice cuanto taller hubo, hasta que terminé en la carrera misma.”

Pablo Alter también comenzó desde pequeño, cuando tenía 11 años. Estudió en el teatro San Martín hasta que terminó quinto año, pero jamás pensó que iba a trabajar como actor. También hizo canto lírico y piano durante tres años.“Hasta que un día me dijeron ‘te animás a hacer esto’ yo dije sí. Trabajé con un grupo en Buenos Aires durante dos años hasta que me vine a vivir a Gesell. En una fiesta del día del maestro en la Escuela Nro 1, fui y una compañera me dijo ‘esto lo tenés que hacer en la temporada” y ahí arranqué, en el año 2000.”

Para Betina Hernández todo fue muy diferente, desde chica a ella le gustaba el teatro pero sus padres no la dejaban estudiar porque lo consideraban de atorrantas. Así que para ella siempre fue una gran deuda pendiente estudiar teatro, lo que lograba hacer era meterse en un club o en algún tallercito. Cuando ya tenía 23 empezó a estudiar seriamente, pero poco después nacen sus hijos por lo que cortó por un tiempo su formación. Y ya en Gesell retomó el taller de teatro. Ella también había estudiado locución y periodismo, que le sirvió con el tema de la voz y de la respiración. “Todo te sirve y lo usas como herramientas sin darte cuenta” dice Betina “Sin embargo, yo creo que es muy largo el camino para recorrer, sobre todo para no cansarse, no repetirse.”

Pero, ¿cómo se formó Alt-Her-A-2?

Betina nos dice que fue un poco por casualidad ya que, por entonces, unos cuatro años atrás, ella y Pablo tenían otras obras. Pablo Alter ya hacía Alter-A-2 en el sur y luego de otro espectáculo de improvisación y de otro espectáculo llamado ‘que los piró’, se armó un espectáculo para la costa con el formato de Alter-A-2. Después de algunas variantes en el equipo actoral, hace dos temporadas se incluye en el espectáculo Verónica Arena como directora y casi sin querer termina sobre las tablas. Así sí, queda formado lo que hoy conocemos como Alt-Her-A-2, con tres personas más fuera de escena: uno en detrás de escenario, otra en camarín y otra en sonido e iluminación.

Pablo Alter: “En realidad nos dimos cuenta que necesitábamos más gente fuera de escena cuando empezamos a salir de Gesell. Cuando vos actuabas acá vos tenía un soporte técnico de la misma Casa de la Cultura que te conoce, pero cuando íbamos a Buenos Aires no teníamos un tiempo de ensayo como para que el iluminador se aprenda toda la rutina que tiene que hacer”.

Personajes

El show tiene varios segmentos, en cada uno de ellos hay interpretación de una canción (a veces con un sentido diferente del clásico), hay monólogos con personajes bien definidos y totalmente diferentes, hay bailes, hay un despliegue enorme de vestuario y no tanta escenografía, lo que hace lucir aún mas la fuerza de sus actuaciones. Además todos los años modifican completamente el espectáculo para que el público que ya los vio pueda volver a disfrutarlos.

¿Cómo crean los personajes?

Pablo: “Yo creo que la creación del personaje pasa más bien por lo que el personaje dice, lo que la canción dice. Al buscarle un segundo significado a la canción, aparece un personaje que dice eso distinto. Y una vez que aparece ese personaje distinto, aparece la personalidad que ese sí es el trabajo del actor.”

Betina: “Siempre teniendo en cuenta que ese personaje sea lo más grotesco posible.”

Pablo: “Al límite del absurdo. Hay una idea sobre el tema, pero después cada uno es libre de generarle cosas cómicas, o grotescas o desestructurando diciendo ‘no puede estar diciendo esto’, tiene que ver con el jugar con la canción. Me ha pasado que, con tanto cambios de personajes, en la rapidez, de tener que preguntarme ¿quién soy? y tener que verme como estoy vestido para darme cuenta.”

A veces, con la composición de los personajes se crea un ámbito de conflicto entre lo que se piensa que el público quiere ver y la innovación. Hay una gran puja en el que se juega el arriesgarse como actor a algo diferente y no a la fórmula que dio resultado el año anterior. Evidentemente el riesgo vale la pena y el público que lo vuelve a ver lo reconoce.

El prejuicio del género

En sus comienzos el espectáculo lo hacían a la gorra. Ya eso, sumado el tipo de espectáculo tenía como un poco de desprecio por parte de sus pares con el argumento “claro, llenan porque es a la gorra”. La misma Verónica Arena cuando se incorpora al grupo, lo hace con mucha duda, no sólo por incorporarse a un grupo consolidado, sino también por todo este preconcepto que se rumoreaba.

Verónica: “Yo cuando me incorporé lo hice con mucho prejuicio, porque desde el teatro este tipo de género está visto como un arte menor. Dudé bastante, no por ellos que los conocía, los había visto actuar y me gustaba mucho como lo hacían, sino más bien por el tipo de espectáculo. Para mí era y fue un desafío.”

Pablo: “La mayoría de los teatreros creen que cuando uno hace un espectáculo cómico, musical, donde hay playback y hay grotesco, no hay construcción de personaje, no hay trabajo serio del actor.”

Betina: “Se piensa que hacer esto es subirse a hacer dos tonterías y no es así, no es nada fácil.”

Verónica: “Es muy complejo, acostumbrada a construir un personaje en un tiempo y un espacio y con un texto rígido, acá tenés que ir tanteando como está el público, que es lo que causa más gracia, son un montón de factores, un laburo complejo. En general los teatreros clásico dicen que para que sea una obra de teatro tiene que tener un texto fijo y tener un principio, un nudo y un desenlace”

Pablo: “Y lo tiene, en cada acto, cada cuadro tiene un principio, un nudo y un cierre”

Verónica: “Sí, pero además toda esa serie de cuadros también tiene una estructura que no es al azar, donde empieza de una manera, van creciendo y eso está pensado, de que vaya cada vez más explosivos, más explosivos, hasta terminar en la explosión total.”

El otro protagonista: el público

Alt-Her-A-2 utiliza en muchas oportunidades al público para sus cuadros. Por lo que hemos observado el público se presta y de manera muy agradable, amena. En cuanto a este otro protagonista esto nos decían los actores:

Betina: “Los ensayos en una obra convencional, vos la venís trabajando y se aproxima bastante a lo que la obra va a empezar a ser. Pero en este show hasta que no salimos y nos encontramos con el verdadero protagonista que es el público, por más que vos ensayes, ensayes y ensayes, el verdadero resultado lo ves cuando estás frente al público.”

¿Ustedes van pispiando de un acto al otro, este lo agarro para el próximo número?

Verónica: “No, en general no vemos mucho la sala con las luces del escenario. Nos ha pasado de sacar los tres al mismo tipo, pobrecito!”

Betina: “yo a veces les pregunto a ellos: ¿Hay un hombre en primera fila? ¿de qué lado sacaste? Porque yo desde el escenario no veo nada.”

Pablo: “Yo juego con la cara de espanto del que voy a agarrar, cuando veo que el tipo dice ‘hay por dios que no venga para este lado’, yo voy a ese. Porque en general el que no quiere salir, se levanta y juega.”

Verónica: “Yo agarro a esa que señala a otra y se lo digo mientras subimos”.

Betina: “La gente que ya nos vio, se engancha mucho a participar; y el que nos ve por primera vez, me da la sensación de que se fija como es la onda, y cuando ven que es de respeto, que la onda no es agresiva, para divertirnos juntos, ahí se enganchan.”

Ave maría

Los chicos de Alt-Her-A-2 salen a publicitar el espectáculo vestidos de monjas. Le preguntamos el porqué y esto nos decían...

Pablo: “Podría ser muy fácil salir a la calle vestidas de feme fatal, pero para mí y para las chicas sería muy difícil, porque la gente no sabe distinguir y como saben que soy varón, se quedarían con la duda si soy travesti o tranformista. Lo mismo que a ellas, porque viéndome a mí, también pondría en duda a ellas y la gente se crearía muchas confusiones.”

Verónica: “Además que ya la gente vendría al espectáculo pensando que es estrictamente tranformista y no es así.”

Pablo: “Además sería como más violento por el tema del travesti, en cambio, cuando la gente te ve te dice ‘ahy!, pensé que eras una monja, que tierno’. Porque claro cuando nos damos vuelta tenemos los ojos y la boca pintados, unas pestañas enormes, entonces la gente se asombra y piensa ‘huy, esto que es?’”

Verónica: “hay también toda una actitud de respeto, porque no salimos con cruces”

Betina “Ni tampoco están haciendo las monjas una acción grosera, violenta ni agresiva para el público. Nos pasó que nos preguntaran el horario de misa”

Pablo: “o donde queda la iglesia, pero, de verdad. Y nosotros le damos la información: la misa es a las 7.30, 8 y para ir a la Iglesia tendría que ir por acá... Ya una vez en el escenario, el mismo escenario te protege. Ya entraste, te podrá gustar más, menos, pero el escenario te protege a que uno puede hacer de monja, de perro, de asesino o de heladera.”

El revés

Los tres están seguros que podrían vivir de esto todo el año, pero también son conscientes de que ese sacrificio les impediría vivir la vida que tienen cada uno, su familia, su ámbito. Los tres eligen hacerlo en verano y en algunos fines de semana en invierno, pero no más. Así es que cada uno tiene su otra vida, la vida fuera de las tablas.

Verónica Arena es profesora de teatro en las escuelas, Betina Hernández es ama de casa y Pablo Alter es profesor de EGB de Filosofía y Ciencias de la Educación.

Invierno

Para el invierno tienen pensado dar el show en algunos fines de semana largos y también hacer alguna obra de texto diferente.

Pablo: “Es también para jerarquizarnos a nosotros mismos. La gente nos ve haciendo esto, les encanta, pero no es lo único que podemos hacer.”

Verónica: “De hecho nosotras dos estamos haciendo ahora en la temporada un show infantil ‘La bruja Berta’, que es totalmente diferente, donde Pablo no sale a escena, pero está presente con una voz en off.”

Betina: “En esa pausa del invierno yo quiero volver a las fuentes, al taller de teatro.”

También el invierno les sirve para preparar lo que será Alt-Her-A-2 2009, aunque siempre estén pensando en nuevas ideas y en la compu de Pablo ya haya algunos bocetos.

Ya para el final nos quedamos con algunos pensamientos sobre qué es ser actor...

Verónica: “Yo creo que el actor tiene un cincuenta o menos por ciento de estudio y el resto lo tiene de laburo arriba del escenario. Tener una gran capacidad de observación y después está en la capacidad que uno tenga en expresar lo que no puede decir en la vida cotidiana, el teatro te da esa posibilidad de vivir cuantas vidas sean posibles en este juego.”

Pablo nos dice que para ser actor se tiene que estar enfermo. “Tenés que estar enfermo, tenés que tener el síndrome de la insatisfacción vital. Esto que decía Vero, el actor es el que es capáz de vivir muchas vidas en una. Y en la medida que tenés capacidad de observación, podés convertirte en la mesera, en el banquero que te atiende mal, en la empleada pública, en la maestra, en el carpintero. En la medida en que vos tengas mayor capacidad para reproducir lo cotidiano, el espectador se siente más reflejado.”

Realmente recomendamos ir a ver Alt-Her-A-2, una opción geselina de alta calidad. Tienen oportunidad los martes, jueves y sábados a las 0.30 durante todo fecbrero y en algunos otros día durante el mes de marzo.

A estar atentos y hacerse una linda espacada al humor. El valor de la entrada es de las más accesibles, tan sólo $ 8. Disfruten y luego comentennos...

Elemento Voráz


En enero Villa Gesell sufrió un incendio en su sector norte. No hubo pérdidas materiales ni humanas pero sí treinta hectáreas de forestación arrasada.

Fabián Camelino estaba haciendo reposo cuando le sonó el celular a las tres de la tarde del viernes 11 de enero: un gran incendio se había producido en la zona norte de Gesell. Ni siquiera pensó en su dolor lumbar que lo mantenía con carpeta médica y salió directamente a la estación de bomberos. Camelino es jefe de bomberos del cuartel de la Villa, pero además director zonal de operaciones, por lo que catorce cuarteles dependen de la operatividad de él cuando sucede un siniestro de magnitud. También es Técnico en seguridad e Higiene y aparte trabaja de otras cosas ya que es jefe de bomberos de manera voluntaria.

Tardó en llegar a la estación ya que vide en el sur de la ciudad; lo primero que hizo es dar alerta roja en la zona y llamar a otros cuarteles, por lo que vendrían refuerzos: dos de Pinamar, uno de Madariaga y otro de Mar de Ajó, más ocho de Gesell. Poco después Fabián subía al ruido de la avioneta del aeropuerto. Desde tierra mucho no se puede ver mucho y un jefe no puede extinguir el fuego sino que tiene que coordinar. Evacuar, controlar y extinguir, ese es el abc de los bomberos.

Desde el aire se aproximó al incendio y logró tener un mapa de riesgo “El panorama era bastante desagradable” dice Fabián quien aún así no perdió la paciencia. En ese momento había tres clases de incendio: el incendio subterráneo, que va por abajo, por las raíces, el incendio de superficie y el de copas. El subterráneo es el más complicado ya que la chimenea de humo se produce y sale a la superficie en un lugar, pero el foco de temperatura, de incendio está en otro lugar que no se puede determinar. Por más que se le eche agua a la chimenea no se está apagando el incendio.

Según Camelino el más difícil es el incendio de copas que era el que él observaba desde la altura. “Yo veía que se prendía shh, en un segundo y no quedaba nada. Parecía que tenía kerosén.

Por entonces el viento no ayudaba ya que, en constante contacto con la base metereológica municipal, informaban vientos de 30 y hasta 40 km por hora, que rotaba y cambiaba. “Yo entonces tenía que cambiar de posición las brigadas. Desde el aire con el handy le daba las instrucciones al segundo jefe abajo. Yo desde arriba tenía un panorama y les iba indicando: ‘estás muy lejo’s, porque desde abajo ellos piensan que están ahí nomás; o los hacía mover, ya que el viento siempre, siempre le tiene que dar en la nuca al bombero nunca adelante, porque se puede quemar o lo puede traicionar el fuego. Vos te confiás que está apagado, caminás por detrás de el, se te viene y quedás en una emboscada.” Tres veces rotó el viento ese día.

Todo el aparato municipal se puso en marcha: recursos hídricos, recursos hidráulico, personal de corralón, de tránsito. Hubo cortes de tránsito y se cerró el acceso de la ruta norte para facilitar la llegada de los refuerzos a la zona, dejando abierto el acceso sur de la Villa.

Ya con un panorama más claro, Camelino fue al lugar del hecho y recién cuando estaba controlada la situación regresó a la estación. A la tardecita volvió a volar, esta vez en un helicóptero “Ya para entonces había focos, pero más controlados” Durante esa noche hubo una guardia que trabajó con mucha más precaución y sobre los focos específicos. Porque en ciertas partes era como una selva y era fácil perderse y desorientarse. De hecho hubo gente que quiso colaborar y se perdió.

A primera hora del otro día se realizó una reunión con las autoridades municipales y a las siete de la mañana nuevamente volaba con un helicóptero-hidro junto con el intendente. “Ahí yo les delimité la zona que quería que había que refrigerar. Arrojaba el agua pulverizada en forma de niebla que rinde más para este tipo de incendios. Quedaba todo totalmente empapado.” El helicóptero tenía que cargar agua de un bañado de la zona de Mar Azul y demoraba quince minutos en ir. Tiró aproximadamente ocho veces agua sobre la zona establecida, cada vez abarcando un espacio de treinta por diez metros.

Se trabajó todo el sábado, el domingo se volció a generalizar otro foco por el incendio subterráneo. En total trabajaron de Gesell 45 bomberos que se fueron renovando. Con todas las compañías unos ochenta y en total entre municipalidad, vecinos y voluntarios unas 350 personas.

Treinta hectáreas de forestación quedaron arrasadas totalmente. El incendió se inició en las inmediaciones de Pueblo Límite, bordeó dos camping y se ramificó hacia el lado de Cariló, llegó hasta el kilómetro 408, casi llegando al circuito de motos de la ruta.

Control y autocontrol

En ningún momento Fabian Camelino pierde la calma. “Te capacitás para eso. El jefe debe estar tranquilo y tranquilizar a los demás que a veces se salen de control por los nervios. A veces hay gritos o insultos, pero hay que dar la tranquilidad. El cansancio, la sofocación, el calor y uno que te esté taladrando la cabeza, tendés a reclamar, siempre hay que aplacar. Yo digo siempre ‘no se grita ni se corre’. El bombero tiene que traer soluciones sino sos parte del problema. El bombero camina ligero no corre.”

Tan sólo una pequeña parte de los bomberos reciben sueldo durante tan sólo dos meses al año: seis en Mar Azul y ocho en el destacamento de Gesell y quince en el Complejo Bailable Pueblo Límite. El resto no recibe dinero alguno por sus trabajos, lo mismo que esos pocos durante los otros diez meses del año. La vocación y el amor al prójimo es lo único que los moviliza. Escribo nuevamente: la vocación y el amor al prójimo es lo único que los moviliza a realizar esta riesgosa y ardua tarea. Tarea que por cierto no respeta hora, ni fiestas ni feriados. Hay quienes hacen rescate en altura, los de accidentología, enfermeros, guardavidas, choferes, etc. Todos con un mismo fin.

Pensamientos en frío

Días después de controlado el incendio de superficie seguía habiendo fuego subterráneo y durante mucho tiempo los bomberos seguían acudiendo a apagar chimeneas. “Arriba veías ceniza, sacábas con una pala un poco de arena y tocábas con la mano y la arena te quemaba, hervía.” recuerda Fabián. Él esperaba una buena lluvia como única solución posible que se hizo esperar durante una semana. Sólo así se controló totalmente la situación. Sin embargo los verdaderos efectos se vieron y ven con el pasar de los días, ya que vegetación que en la superficie parecía no haber sido lastimada se seca debido al calor subterráneo que la afectó.

No es el primer incendio de importancia del jefe de los bomberos, él recuerda uno complicado como fue el del Camping de Ingenieros en Mar Azul, donde hubo dos mil cuatrocientos evacuados. Sin embargo sólo afectó ocho hectáreas.

“Yo lo venía previendo desde hacía mucho. Yo observaba las cosas y veía que cada vez era más grave, más grave. Nosotros teníamos dos salidas diarias en 2004, 2005, cinco a lo sumo. Y ahora vos ves diez, doce, quince diarias. Yo pensaba acá en cualquier momento pasa algo grande.”

Para Fabián Camelino la situación topográfica de nuestra ciudad es muy complicada. “Si llegara haber un incendio en el sur va a ser uno solo, se va a quemar todo. No hay material que sea ignífugo, vos le acercás cierta cantidad de grados y se quema, es más, pasa a ser un combustible.

Habría que escuchar a los que saben del tema. En estas cosas son todos opinólogos, pero en cuestión de seguridad no se puede improvisar.”

Fabián Camelino plantea controles que están al alcance de nuestra ciudad. Desde los controles en las construcciones donde el tiraje de las chimeneas no puede estar pegada a las copas de los árboles; hasta una cuadrilla de Guardaparques municipales controlando con vinoculares, haciendo recorridos con cuatriciclos continuamente y realizando prevención. En cuanto a materiales para combatir el fuego faltaría un unimov y la reparación de uno que está averiado, que aún estando para reparar en el momento de necesidad no se puede utilizar y por ende es como si no estuviera. También les hace falta a los bomberos una escalera mecánica de gran altura para incendios en estructuras. Se necesita hacer nichos con tanques de agua en la zona sur del partido, para tener provisión de agua propia.

No se trata por cierto de un reclamo político ni mucho menos, sino de una realidad que urge y que a la hora de los papeles no es un chiste y se gasta más en la cura que en la prevención.

Lo bueno es que no se cobró ninguna vida, si bien el daño vegetal costará muchos años en recuperarlo. La enseñanza es que más allá de las diferencias se trabajó codo a codo. Es un equipo no es una persona.”

Su voz nos reconforta, nos causa admiración que alguien, por suerte, tenga tal vocación y hable de sus colaboradores con tanta estima.

Nuestras más enteras gracias a su persona, Fabián Camelino y a todos los bomberos de nuestra frágil Villa.

Caracoles de Madera


Madariaga

Casilla de los pioneros de nuestra vecina ciudad gaucha.

En el número de enero hablamos de las casillas de madera construidas en Ostende, de la última sobreviviente, “La Elenita”. Ésta también es una de las últimas sobrevivientes, pero su historia es bien distinta. Se trata de una casilla ubicada en Madariaga, en la calle Avellaneda nro 737. Estas casillas, porque hubo muchas en los comienzos de la fundación de Gral. Madariaga, allá por 1907, las traían de Gral. Lavalle. Como allí el piso no era tan firme, era húmedo, anegadizo, de cangrejales, las construían sobre pilotes. A las más grandes se las trasladaba sobre la chata de un carro siempre armadas y a las más pequeñas sobre los hombros de los mismos dueños. “Mi abuela” comenta Mariela quién es guía de turismo de Madariaga “nos decía que la Calle Ancha era como un desfile de caracoles”.

Pero ¿porqué casillas de madera y no construcciones de materiales firmes? Esto se debe a que los que llegaron a la naciente Madariaga, en ese momento llamada Colonia Estación del Divisadero, venían a arriesgarse en esta nueva zona y por lo tanto el construir una casa de materiales firmes implicaba una inversión que no estaba asegurada. Muchos trajeron sus casillas con la idea de que si les iba mal, las desarmaban y se volvían a sus lugares natales. Por otro lado también hubo gente con otros recursos que ya desde el comienzo construyó grandes solares y casas firmes.

La zona elegida para el asentamiento era una zona con poca forestación, no olvidemos que en su comienzo el tren mismo llega porque sobre esta zona había grandes extensiones de bosques de tala, que servirían de combustible para el tren. Sin embargo no imaginemos una zona totalmente despoblada, ya desde 1830 había movimiento y población en busca de la formación de un pueblo propiamente dicho; hasta ahí las autoridades se daban en las estancias. Ya en 1880, había una colonia con ranchitos de barro y pulperías. Todo eso hoy por hoy ha desaparecido. Existe una réplica realizada por Daniel Carán y su hermano, construida con barro por el año 1990. Se trata de una pulpería ‘La Cruz del Sur’que ahora sólo funciona con contingentes y a pedido. Está ubicada en la calle Mitre al fondo.

Se dice que esta última casilla visible es de 1905, procedente de Gral. Lavalle. Existen otras, pero están escondidas por construcciones, muros.

Cuenta Bocha Arancedo, escritora de la historia de Madariaga: “Un censo realizado en la época de la fundación contaba 31 casillas en la zona urbana, centro y alrededores. Recuerdo dentro de las 31: la casilla de Don Antonio Rospide y familia, viva hasta hace pocos, pocos años. La casilla de Lavandal, donde varios alquilaron, entre ellos: el hermano del Padre Suárez que era su monaguillo por los años ’30 y ’40. La de Cullita Lenáz y sus hermanas, que hasta hace poco estaba y los recordamos sentaditos en el corredor. La de mi abuelo José Eyras, que luego fue de los Camecelle y donde vivió durante muchos años la familia Alegre.

Muchas de ellas se conservan y tienen cien años. La de la calle Avellaneda casi Buenos Aires, es también centenaria aunque no se sabe quién fue su anterior propietario. Había dudas de si ésta fue la que habitó Don Domingo Cabrera, ya que su propietaria, ahora muy mayor, decía que en esa casilla había un escritorio que atendía al público. Suponemos que sería una oficina, pero nunca tuvimos la certeza ni el documento. También se comentaba que en esa casilla vivía un grupo de ingenieros que vinieron con Don Arturo Etchegaray cuando hicieron la mensura para trazar las calles de este pueblo. En esta casilla sí sabemos que vivió el matrimonio Don Domingo Galicia y Doña María Cabrera. El terreno sobre la que se edificó era parte de un solar de Abelardo Falabignian. Ellos, los Galicia, fallecieron hace muchos años, aunque fue heredada por su hija que ahora no la habita.”

Cuenta Bocha Arancedo también, que la casilla estaba bien mantenida y era muy cómoda: alta del piso se entraba subiendo tres escalones, toda de madera, con galería al frente y atrás. Tenías tres piezas: una hacía de comedor. La cocina y el bañito era de material, estaban afuera y aún se encuentra en uso. Esto era una costumbre ya que las cocinas eran a leña con braseros, por lo que el material de la casilla al ser de madera corría peligro de incendiarse.

La Dirección de Turismo insiste a los dueños en restaurar la casilla y convertirla en un museo por su gran valor histórico. Ojalá esto en algún momento pueda realizarse y conservar viva la historia y no sólo con el recurso de la memoria.

El Poder de la voz



39° Encuentros Corales de Verano

Nos introducimos en el Anfiteatro del Pinar para dejarnos llevar por el instrumento de la voz.


Es de noche, desde la calle nada se ve, sólo dan la pista algunos autos estacionados. Entramos en el bosque y un camino de arena nos conduce, hacemos unos pasos y descubrimos el anfiteatro hecho con quebrachos y protegido por muchos pinos. Allí, abajo, adelante, la plataforma donde puntualmente se acomodan los coristas. Hay gente mayor, gente joven, familias con sus niños correteando; algunos se sientan en las gradas, otros que ya han estado antes se traen sus reposeras de playa, algún que otro mate pasa de mano en mano. El coro se presenta y las voces se elevan y llegan asombrosamente nítidas. Si uno quiere puede diferenciarlas e individualizarlas. Los pies ya empiezan a moverse, los chicos se paralizan y quedan hipnotizados, sin que ellos se den cuenta las rodillas se les flexionan repetitivamente. El hechizo de unas simples voces unidas se expande. La noche es fresca pero no incomoda, algo en esas voces reconforta y nos llena de paz y, bajo nuestros pies, la pinocha...

El Anfiteatro del Pinar es un anfiteatro natural que provoca una acústica muy especial, es una olla natural que eligió en su comienzo el mismo fundador Don Carlos Gesell y que cedió para que justamente allí se realizaran los encuentros corales. La Sociedad de los Encuentros Corales es una institución cultural sin fines de lucro que desde hace 39 años e ininterrumpidamente ha realizado los conciertos corales de verano. Por semana hay entre dos y cuatro coros, sumado a un coro local que generalmente actúa. Han venido de todas partes del país: San Luis, de Córdoba, de Jujuy, Santa Fé, de Buenos Aires, de Mendoza. El repertorio es de los más variado desde contemporáneos hasta negros spirituals, folclore, tango, clásico. Desde Charly García a Esteban Agüero con su ‘digo a la mazamorra’. Todo puede transformarse en repertorio para coro, a veces apenas acompañado con una guitarra, percusión, un piano o una flauta traversa. Cada coro con su estilo propio. Y siempre hay algún director que hace participar al público en escena o desde las gradas y es una fiesta compartida.

Le preguntamos a María Cecilia Ávalos, quien conforma parte de la Institución qué significan los encuentros corales, para el público y para los mismos coristas y esto nos decía:

“Es brindarles al público un espectáculo de calidad ya que todo lo que los coros trabajan durante el año lo vienen a reflejar aquí. Y más allá de eso, lo que hacen los coros es pasar una semana en Gesell compartiendo todos los días la mesa para comer, las charlas y los fogones a la noche, los ensayos porque a veces hacen masas corales en conjunto y algún que otro taller.”

En el predio existe una musicoteca con todas las partituras de todos los coros que han pasado durante estos 39 años. Estas partituras están a disposición de directores para que las compartan.

Coro de Turistas

Hace algunos años se retomó la actividad de incorporar a los turistas en un coro propio. Así aquellos que visitan la Villa pueden realizar ensayos con la Profesora Sandra Ríos y un día a la semana se presentan y cantan. Para aquellos interesados simplemente tienen que acercarse al Anfiteatro e inscribirse.

Los Encuentros Corales están declarados de Interés Turístico municipal permanente, provincial y nacional.

Realmente recomendamos esta actividad que pocas veces tenemos posibilidad de disfrutar y que tanto reconforta. Una actividad para toda la familia.

Actividades

Los Encuentros Corales se realizan todos los miércoles y sábados de febrero hasta el primero de marzo inclusive en el Anfiteatro del Pinar de av. 10 y Paseo 102 a partir de las 21 hs. La entrada es libre y gratuita, en caso de lluvia se posterga para el día siguiente.

Sábado 9

  • “Coral desde el Alma” – Mendoza – Dir. Hebe Yacante
  • Coral Las Flores – Buenos Aires – Dir. Américo Reyes
  • Vocal San Marcos – san Luis – Dir. A. Moretti y Daniela Pereyra Jamenson

Miércoles 13

  • Coro Polifónico de Cosquín – Códoba – Dir Patricia Domínguez
  • Coro del Colegio Nacional “Almirante Brown” – Adrogué – Bs. As. – Dir. R. Barrera
  • Bocca Chiusa – San Luis – Dir. Alejandro Moretti y Daniela Pereyra Jamens

Sábado 16

  • Bocca Chiusa – San Luis – Dir. Alejandro Moretti y Daniela Pereyra Jamens
  • Coro Polifónico de Cosquín – Códoba – Dir Patricia Domínguez
  • Coro del Colegio Nacional “Almirante Brown” – Adrogué – Bs. As. – Dir. R. Barrera

Miércoles 20

  • Coro de Cámara de UCASAL – Salta – Dir. Jorge Lhez
  • Coro Municipal de Bialet Massé – Córdoba – Dir. Patricia Domínguez

Sábado 23

  • Coro Municipal de Bialet Massé – Córdoba – Dir. Patricia Domínguez
  • Coro de Cámara de UCASAL – Salta – Dir. Jorge Lhez

Miércoles 27

  • Coro Estable de la Provincia de Santiago del Estero – Dir. Eduardo Bucci

Sábado 1 de marzo

  • Coro Estable de la Provincia de Santiago del Estero – Dir. Eduardo Bucci

Además los viernes a las 19 hs se sigue con la tradición de cantarle al Fundador de la Villa en su casa en el Centro Cultural Chalet de Don Carlos en Alameda 201 y calle 303, Pinar del Norte.

Para quemar pestañas


Maridos de Angeles Mastretta

Este mes recomendamos un libro delicioso. De la escritora mexicana Ángeles Matretta que ya nos ha conquistado con otros libros como “Mujeres de ojos grandes”, “Arráncame la vida” o “Mal de amores”. En este caso nos llega su literatura a través de cuentos ágiles, diferentes todos pero con el toque único de ella. Son cuentos de amor y, por ende, de engaños, de ternura, de destino, de azar, de muerte, de vida, de maridos, de viudas y de vidas. Nuevamente Ángeles Mastretta nos trae historias que ocurren en México y muchas en su Puebla natal.
Con una prosa precisa nos sitúa y recrea en pocas líneas toda una vida y el sentimiento de las mujeres. Con aquel don que poseen pocos de expresar con las palabras exactas lo que uno ha pensado al pasar muchas veces.
Altamente recomendable “Maridos” y después me cuentan...
Pueden encontrar este libro en Alfonsina, en sus dos direcciones: en Av. 3 entre paseos 105 y 104 o en Alfonsina del Bosque en el Paseo Pueblos Blancos de Mar de las Pampas, local 1.

Contratapa


HORMIGAS SONORAS

Supuestamente son siete notas principales y cinco sostenidos (algo así como sonidos intermedios entre algunas de estas notas).

Con ellas, gente que me asombra hace música clásica o folklore o tango o rock and roll; y gente que también me asombra hace cumbia o regetoon.

Increíblemente son las mismas notas. Sólo varía su ubicación, su repetición, cuán largo o corto se toque, sus silencios. Una ligadura (algo así como tocar una o varias notas sin cortarlas, sin separarlas), una ligadura mal ubicada puede cambiar la música.

En mi cuaderno de principiante de violín, arriba a la derecha, antes de cada pequeña partitura se lee una palabra: “flowing” (fluyendo), “Vigorously” (vigorosamente) , “legato”, “great vigorour” (gran vigor ), “Daintily” (delicado), “Brightly” (brillantemente ), “Peacefully (pacificamente ), “Gracefully” (agraciado), “Simply” ( simplemente); entre muchas otras. *

Yo al principio no me percaté de estas palabras. Ya tenía bastante con leer estas hormigas negras o blancas, con o sin patas, que se tocan unidas o separadas, con el arco hacia arriba o hacia abajo, con acertarle a la cuerda y a la ubicación del dedo en la madera para que suene un decente ‘la’. Suficiente guerra batallaba con esto como para que encima me saliera “pacíficamente”.

Como estarán observando cuál es mi perspectiva más de uno dirá que es bastante limitada. ¿Qué puedo saber si a mi me cuesta sacar unos simples sonidos sin que mis vecinos me golpeen la puerta?

Pero, tal vez por esto admiro aún más la música o cierta música.

Cuando uno encara la difícil tarea de aprender un instrumento de grande, existe un equilibrio entre frustración y admiración.

Cuando sacamos la primera partitura, sencilla para cualquier oyente, extraordinaria para nosotros, el profesor da vuelta la hoja y allí hay otro mundo sonoro por descubrir. Antes de dar vuelta la página esa música no existía en nuestra mente y siempre estuvo ahí, esperando.

Por cientos de años se han conservado partituras (hormiguitas para mí) que cual receta misteriosa, al unir los ingredientes, se trasforman en una excelente comida para chuparse los dedos.

Como dije al principio, son tan sólo siete notas, combinadas con tiempos y silencios lo que hace que uno pueda bailar vigorosamente, sonreír, llorar, soñar, suspirar, sin que aún no entendamos muy bien por qué.

El poder de la música hasta el que tenga el oído más duro lo percibe. Será por eso que en muchos períodos de la historia se ha prohibido cantar o tocar un determinado instrumento. En la próxima contratapa les traeré ejemplos de ello.

Saludos, mis queridos lectores!

Ojalá puedan tomarse el tiempo de escuchar atentamente su música preferida y poder llorar, sonreír, suspirar, soñar o bailar desenfrenadamente!

* las traducciones son a ojo y tal vez no sean las exactas o correctas.

Editorial

EL ARTE EN GESELL

Pocas ciudades ofrecen a sus habitantes y turistas tantas opciones de muestras artísticas y arte puro. Quienes vivimos en la Villa todo el año sabemos de las muchas y variadas actividades que podemos realizar: desde deportes hasta todo lo referido a lo cultural, a saber: pintura sobre tela o madera, tallado, idiomas, violín, dibujo, danzas españolas, árabes, clásica, jazz, teatro, guitarra, bajo, canto y la lista podría seguir y seguir.

Durante los meses de verano nos llegan otros artistas provenientes de todo el país: músicos, teatreros, titireteros, malabaristas, artistas plásticos, estatuas, acróbatas. Todos ellos se suman a los nuestros y pululan en cafés, teatros, en la playa, en el bosque, en la calle misma. Porque el arte en Gesell es abierto, económico, accesible para quien lo quiera mirar. Los artesanos se agrupan en la 112 y 3 y, más al sur en 133 y 3; los encuentros corales en el bosque; la peatonal y sus artistas callejeros; los pequeños rincones a cada paso donde se muestra alguna exposición de fotografía o pintura. Teatro para chicos y grandes.
Arte, donde quiera que vayamos, siempre hay alguien haciéndolo. Nos subimos al colectivo local y un padre y su hijo nos regalan sonidos norteños, así de sencillo, mezclados entre los pasajeros, música suelta hasta tu próxima parada. Caminás por la playa y no te asombra encontrarte con dos chicos tocando una armónica o un tamborcito. Tampoco te llama la atención ir por el bosque y encontrarte con un solitario muchacho que practica con su trompeta. Muchas casas de la Villa tienen esculturas en sus jardines o detalles de arte realizados por sus propios dueños.

Arte, siempre Gesell con arte. No arte de salón cerrado, con invitación y copa de vino de bienvenida. No, arte por todos los rincones, abierto a todos. Una linda cualidad que poseemos y que tenemos que cuidar, cultivar y fortalecer. Porque no solo somos playa, bosque y médanos. Los días nublados también hay para hacer y mucho en nuestra pequeña aldea.